Un Domingo 29

Un domingo 29 la vi por primera vez. -Dios que hermosa que es.- pensé en un primer instante. Y durante todo el día me dedique a observarla, oculto detrás de un lente de cámara pensaba -¿Porque me vine tan croto? así no me va a dar bola nadie y menos ella.- Pero si me vio, noto que estaba ahí, aún no entiendo como pero así fue.

La mire varias horas, trate de ser disimulado, pero no me salio. Observe cada detalle de su fisionomía, sus tobillos, sus rodilleras azules, sus shorts cortos, su hermosa cintura que me volvió loco, su pecho imaginando como cabria perfecto en mi mano, sus brazos largos y delgados, pero con la fuerza suficiente para voltearte de un pelotazo si quisiera. Su rostro que representaba la hegemonía y su mirada perspicaz acompañada de su sonrisa curiosa. Concentrada por el partido, dando todo el la cancha con su seño fruncido.

Con la misma decisión que mostró ese día en la cancha me busco. Eso si que me volvió loco. Y yo como lo fácil que soy respondí.

Cuando nos vimos la primera vez, me dije a mi mismo - Se como sos, un poco loco, medio pelotudo con alma de niño.- y así fue. esa tarde jugamos como niños. Y CREO QUE ESO LE GUSTO!! pueden creerlo? por que yo no, y menos que menos cuando seguimos hablando. Me quería volver a ver, quería conocerme.

Lo único que podía pensar era en ella. En lo hermosa que es, su risa, el olor de su perfume dulce impregnado en mi almohada. En la siesta que dormí con ella, como había podido conciliar el sueño rápido, como la ansiedad desapareció.
Me sentí un pinche niño con ella, pero me calentaba como el mismo sol. Y eso me da miedo.

Cuando la veo siento un maldito huracán de emociones pasando por mi cuerpo, miedo, alegría, ternura, calentura, pánico, tranquilidad. Si, suena loco como un huracán puede causar tranquilidad.
Desde que la conocí, la pienso diario. La extraño diario. Es todo muy raro, Fuerte. Nunca me había pasado, ella me da vueltas la cabeza.

Por un lado quiero perderme en ella, empotrar la contra la pared y arrancar toda su ropa, ver sus cicatrices y besar sus lunares, llevarla a mi cama, para que no solo su perfume quede en ella, si no su esencia misma.
Quiero aprender a leerla, leer sus gestos en el sexo, conocerla y llegar, algún día, a hacerle el amor.
Quiero aprender de ella, de sus besos, de sus muecas y sus enojos. Quiero verla dormir y despertar, quiero salir a pasear y sentir ese calorcito que dicen que cuando sonríe se te forma en el pecho.
Quiero, quiero, quiero. Pero ella? Querrá lo mismo?

Por otro lado tengo miedo de entregarme, de darle mi esencia, mis miedos y mis inseguridades. A veces me siento patético por ser así. Tan emocional, de sentimientos que afloran fáciles, como una rosa en primavera. Pero cuando sientes esa necesidad de cariño distinto, un cariño mas intimo. Cualquier sentimiento aflora con la mas mínima bola que te dan.

Dios, como me vuelve loco. Hace que ponga en perspectiva mi vida, que la ansiedad me vuelva loco, que no se como actuar, que decirle, como hablar por whatsapp, porque nunca hablo por wapp. Que quiera verla todos los días, o al menos esos maravillosos 10 minutos al día que me ponen al cien.

Como le digo que quiero ir despacio, pero al mismo tiempo que voy a fondo? Como controlo la ansiedad? Y la ambivalencia? como hago para demostrarle interés para que no sienta que la rema ella sola?  Como le digo que es la primera que me hace sentir así? Que quiero que me tome de la mano y me diga que se puede? Como la hago leer esto sin que se sienta presionada o se lo tome a pecho?

Por que carajos soy así? de sentimientos tan intensos. Que todo me emociona, que lo mas simple y puro me hace llorar, que cosas tan tontas como estas me desvelan en la noche. Como hago para sentir menos? Para dejar de mirar triste al mundo?

Preguntas como estas me abruman, y nacen todos los días unas nuevas.
Pero bueno, Quien dijo que conocer a alguien que te de un abrazo que te rompa las costillas, que te haga dar cuenta que tenes corazón iba a ser fácil?

Acá te presento mis miedos.

Que linda.

Que linda la mina simple loco. La ves ahí, sola, toda loca, toda rota tratando de armarse de nuevo, hermosa... Y pensas, "El que te vio y no se enamoro de vos no entendió nada" Y vos tampoco entiendes como nadie se la jugo por ella, te cuenta que la paso como el orto y te nacen ganas de viajar al pasado y decirle a cada uno de los que la dejo pasar -Sos un pelotudo, pero gracias, hoy me toca a mi.-

La ves ahí, acomplejada por un kilito de más o de menos, por un poquito de celulitis o alguna estría que la vuelve loca y a vos y te parece lo mas hermoso que vieron tus ojos en toda tu puta vida... La ves ahí, simple y ella ni se da cuenta de lo que es.. o si, pero no se agranda y eso la hace mas linda.

Que puto poder tiene la mina simple, de complicarnos la vida de una forma tan linda. Les basta un "Hola!" y nos embrujan, les basta un beso en la mejilla para dejarnos impregnado ese perfume que no se va más y se te mete en la almohada a susurrarte por la noche que no te olvides de pensarla antes de dormirte... y no te olvidas.

Que hermosa y retorcida manera que tiene para alegrarte el día, a tal punto que si no hablaste con ella no disimulas la cara de orto.

Que cosa rara que te hace sentir cuando sonríe; que manera de cagarte la existencia con algo tan simple como una sonrisa no? Como un gesto tan boludo te da manija para creer que si sos capaz de hacerla sonreír sos capaz de todo.

Pero que difícil verla triste, hay hermano, que sensación de mierda verla con los ojos vidriosos, la mirada baja, gritando en silencio que alguien se avive que se esta cayendo. Suplicando una mano detrás de un "Estoy Bien", que difícil loco...

No se si entiendes lo que digo, yo creo que si, que alguna vez te paso, que alguna vez lo sentiste... Sabes de lo que hablo. Si hoy tenes la suerte de tener una simple, valorala mientras este al lado tuyo, no como la mayoría que se da cuenta cuando ya esta en brazos de otro...

Creo que yo tengo una simple, despues de mucho tiempo. Y no estoy sabiendo como enamorarla, como quererla. Por que atrapado en los miedos el que no es simple soy yo.
Tema para el siguiente post.

Como empezar, simplemente por el comienzo

Como comenzar a explicarte, como empezar a contarte la historia de cada uno de mis fragmentos, que cada uno es una historia distinta, pero que todas terminan en un final parecido, con un nuevo trocito.

Entre lagrima y lagrima, entre suspiro y recuerdo; comienzo a contarte la historia de mi primer trocito, el primer punto donde comienza la grieta de esa energía que llamamos alma.

Aquella vez tenia trece años, habíamos pasado por muchas tardes de felicidad, de juego, peleas en el barro y veranos de alegría. Hasta que ese deseo de descubrir su persona nació en el. Floreció y creció como una hiedra, envolviéndolo en un deseo constante de experimentar hasta sentirse saciado. Justo ahí, cuando la planta no tenia mas donde crecer en su cuerpo comenzó a invadir el mio.
Y yo, como el menor, el ingenuo, el manipula ble me deje enredar. Metí el pie tan a dentro que ya estancado no veía lugar para salir. Bajo sus amenazas, su asfixia y su secretismo me deje consumir por su macabro deseo de usarme, de usar mi cuerpo para saciar el suyo. Dolor y llanto tres veces a la semana, ocultar las lagrimas y sentirme sucio. Duchándome cinco veces en el día para ver si el asco abandonaba mi piel. Ahí en llantos mudos y lagrimas disfrazadas por el agua nadie me vio, nadie escucho mis gritos mudos ni se percato de mi mirada perdida en la nada.

Ahí fue donde el primero de los pedacitos que me conforman hoy nació.

El segundo solo fue el que continuo agrietando me.
Cuando Mi hermana mas grande solo se dedicaba a grietar la familia. Un huracán de un negro tan puro que termino por pintarme de negro, y manchar todo por donde pasaba. Gritando por que la maldita enredadera seguía creciendo. Esa que comenzó conmigo la atrapo a ella. Y el PELOTUDO de mi no tubo mejor idea que cambiar su lugar por el de ella. Como llore. Como me hundí y seguí cayendo más y más profundo. Seguía sin ser visto. Pero a estas alturas ya me había armado de instrumentos para sacar mi dolor de una forma poco notable, para que los intrusos no preguntaran. Así el pequeño adolescente entro en un espiral rojo, hecho de su dolor, sus lagrimas y su misma sangre.

Crecí, me di cuenta que con una pequeña navaja podes contar la ramas asfixiantes que no te dejan ver la luz, corte por lo sano. Corte por mi. Por que ya me sentía abrumado de tanto ser usado, Luego de eso ya no podía dormir, había hecho daño. Mejor dicho se había dejado dañar.

Tenia el alma rota, la garganta muda, los miedos a flor de piel. Se veía como una ropa vieja y ya no quería seguir. Y como no sabia como volver  a juntar los pedacitos y volver a armarlos simplemente tomo la decisión de juntarles todos, así, desordenados y guardarlos en una cajita para que nadie los viera. Siguió caminado por la vida fragmentado, son el aire pasando a través de lo que el trocito faltan te dejo.

Con el alma rota continuo caminado ese chico con la mirada perdida. caminando sobre el filo de un cuchillo mirando hacia arriba. A sus ojos la gente indeseable parecía mas interesante, El turismo emocional mas barato. Se tomo un vuelo directo a la nada, con una barra libre de todo vale.

Comenzó a equivocarse de alcohol para curar sus heridas, las siestas se hacían mas largas, y los cigarrillos mas cortos. Sus noches de pesadillas se parecían mas al infierno. Sus miedos crecieron. Ya no se dejaba tocar por nadie, tenia miedo de que lo lastimaran. Decidió que era una persona rota, incapacitada emocionalmente para amar a alguien. Se fue quedando poco a poco solo, no podía querer, no sabia como hacerlo.

Así fue todo, muy triste y muy oscuro. Hasta que se enamoro de ella. Una parlanchina chispeante, totalmente diferente a el, a la que le entrego todo. Todo eso que no tenia para dar, que gran error dar lo que no tenes.
Boceaba de amarla, de quererla. Las noches que pasaba pensándola. Para la cual le dedicare otro post. Por que ella se lo merece. Ella pego todos sus pedacitos. Abrió esa caja que tenia oculta. pero despues se encargo de tirarle un misil de bazuca. Cuando el le dejo ver los pedacitos, las ramitas que había guardado como recuerdo de lo fuerte que había sido, que pudo salir solo de un abuso psicológico y sexual, ella le prendió fuego a todo. Abrió las puertas de un nuevo infierno. Y como si fuera poco se metió con su mejor amigo. A ese que le había confiado todos sus miedos. Que lo acompaño a enfrentar sus cagadas. A ese que ya no puede llamar amigo.

Acá termina una primera parte.

Cero y Uno. un poema binario de Cesar.

Uno no quería contar con nadie, y uno no entendía porque era impar si atrás de el había alguien.

Uno no quería contar con nadie y Uno sentía que despues de el estaba el infinito.

Y a Uno lo sempiterno le daba miedo, así que Uno, muerto de pavor, se fijo en Cero.

Y cuando Uno vio a Cero, pensó que Cero era el numero más bonito que había visto y que, aun viniendo antes que el, era entero.

Uno pensó que en Cero había encontrado al amor verdadero, que en Cero había encontrado a su par.

Así que decidió ser sincero con Cero y decirle que aunque era un cero a la izquierda, sera el Cero que le daría valor y sentido a su vida.

Eso de ser el primero ya no le iba, así que debió hacer una gran bienvenida.

Juntos eran pura alegría y se completaban.
Uno tenia cero tolerancia al alcohol, pero con Cero se podía tomar una cerveza cero por su aniversario, aunque para eso tuviesen que inventarse una fecha cero en el calendario.

Cero era algo cerrado y le costaba representar textos pero, junto a Uno hacían el perfecto código binario.

Eran los dígitos del barrio y procesaban el amor a diario, pero uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, así que Uno perdió a Cero.

Y para cuando Uno se dio cuenta, Cero ya contaba de la mano con Menos Uno, que a pesar de ser algo negativo le trataba como una reina.

A Cero le gustaba que Menos Uno fuera algo original, tener un hueco en Menos Uno, un guion con el que podían jugar.

Cero le gustaba que Menos Uno no fuese uno más, que Menos uno no fuese ordinal.

Que fuese justamente competitivo y que cuando jugasen al Uno, Menos Uno no le dejase ganar.

Cero sentía que a diferencia de Uno, Menos uno si le trataba como un numero de verdad.

Y Menos Uno no ponía peros, ni pretendía darle valor a Cero poniendo comas entre ellos.

Menos Uno tenía complejos, y cuando hacían el amor, a Menos uno le encantaba estar bajo Cero.

Y Uno, una vez más se volvió a quedar solo, separado como una unidad.

Sin Cero, su vida se consumía como una vela. Sin cero, el tiempo en el hacia mella...

Y Uno empezó a contar pero sin Cero, se olvidó de los besos de Cero, del sexo con Cero, de los celos de Cero...

Y uno empezó a contar, pero sin Cero.

Uno se olvido de Cero y le dijo adiós. Uno se olvido de Cero y tal vez del amor, y empezó a contar hasta lo que mas miedo le daba: hasta el Infinito...&

...O tal vez solo hasta dos.